La simple idea de despertar lo aterraba, estaba viviendo tan a gusto en su sueño, que el despertar era lo ultimo que necesitaba. Sin quererlo se acostumbro a ello, y no tubo más remedio que seguir su extenso sueño. No recordaba bien cuando se había dormido, es mas no recordaba nada de cuando estaba despierto, y luego de dormido los recuerdos solo se remontaban a años después del sueño. Él sabía que no se puede estar dormido toda la vida, que simplemente dormimos un periodo determinado. Algunos despertaban antes otros después, pero todos en algún momento despertarían. Al no recordar lo que sucedía al estar despiertos, él le asustaba mucho el hecho de terminar su sueño. Pero la mayor parte de el tiempo no pensaba en ello, solo lo hacia en situaciones que no le favorecían en absoluto. Sin ir muy lejos, cuando se vio en aprietos, hace un momento, lo único en lo que pensaba era en despertar, no quería seguir durmiendo este sueño. Y así lo hizo, subió al piso más alto de su edificio y salto al vacío.®